Apple acelera en IA para competir con Google y Microsoft

Apple se apura en IA tras quedarse atrás de sus rivales más abiertos.

La inteligencia artificial (IA) es una de las tecnologías más prometedoras y disruptivas del siglo XXI. Pero, ¿quién está a la cabeza de esta revolución? ¿Qué empresas e instituciones están invirtiendo más y mejor en el desarrollo de la IA? ¿Qué desafíos y oportunidades se presentan para el futuro de la humanidad?

Hablemos un poco de IA, analizando el papel de cuatro actores clave en el campo de la IA: Apple, Google, Microsoft y OpenAI. Pero hagamos un énfasis en cómo Apple se apura para construir sus propias herramientas de IA y ponerse al día. Aclaro que no hablo aquí de Meta y Amazon para no hacer el artículo muy largo. Pero estas compañías no mencionadas también tienen sus proyectos de IA. Aquí no cubriré todo el campo de la IA. Simplemente, es una introducción general de los principales actores en esta competencia.

Google es, sin duda, uno de los líderes indiscutibles en el desarrollo de la IA. Su buscador, su sistema operativo Android, su servicio de correo Gmail, su navegador Chrome, y su plataforma de vídeos YouTube son solo algunos ejemplos de cómo Google ha integrado la IA en sus productos y servicios. Además, Google cuenta con Google Brain, su equipo de investigación en IA; con TensorFlow, su biblioteca de código abierto para aprendizaje automático; con Google Cloud AI, su oferta de servicios en la nube para IA; y con DeepMind, su filial especializada en IA general y en IA aplicada a la salud, la energía y los juegos. Bard, su chatbot experimental, ya está en varios idiomas. 

Microsoft es otra de las empresas que ha apostado fuerte por la IA. Su sistema operativo Windows, su suite ofimática Office, su navegador Edge, su consola Xbox y su red social LinkedIn son algunos de los productos que incorporan la IA de Microsoft. Además, Microsoft dispone de Microsoft Research, su división de investigación en IA; de Azure AI, su plataforma de servicios en la nube para IA. Además, Microsoft tiene una relación muy estrecha con OpenAI. De hecho, Big Chat, su chatbot, es muy creativo. 

OpenAI es una entidad única en el panorama de la IA. Se trata de una organización sin fines de lucro que busca crear una IA general alineada con los valores humanos y que pueda ser usada por todos. Para ello, OpenAI realiza investigaciones punteras en el campo de la IA, como ChatGPT, el modelo más avanzado de generación de lenguaje natural; o DALL-E, el modelo capaz de crear imágenes a partir de texto.

Apple es una de las empresas más exitosas y valoradas del mundo, gracias a sus productos innovadores y a su ecosistema integrado. Sin embargo, en el ámbito de la IA, Apple ha sido más discreta y reservada que sus competidores. Aunque cuenta con Siri, su asistente virtual, y con Core ML, su plataforma de aprendizaje automático, Apple no ha destacado por sus avances en IA general o en IA conversacional. Además, su política de privacidad y seguridad le ha impedido aprovechar al máximo los datos de sus usuarios para entrenar sus modelos de IA.

Apple es famosa por sus productos innovadores y elegantes, pero también por su secretismo y su control sobre todo lo que hace. Sin embargo, en el campo de la inteligencia artificial (IA), esta estrategia le ha pasado factura, ya que se ha quedado atrás de sus competidores como Microsoft, Google, Amazon o Facebook, que han apostado por compartir sus avances y colaborar con la comunidad científica. Para remediar esta situación, Apple ha decidido cambiar de rumbo y empezar a crear sus propias herramientas de IA, que le permitan desarrollar aplicaciones más inteligentes y personalizadas para sus usuarios. 

Algunos ejemplos de estas herramientas son Overton, un sistema que facilita el entrenamiento y el despliegue de modelos de IA; Create ML, una plataforma que permite a los desarrolladores crear modelos de aprendizaje automático sin necesidad de tener conocimientos avanzados; o Core ML, una biblioteca que optimiza el rendimiento de los modelos de IA en los dispositivos de Apple.

Con estas iniciativas (y otras no mencionadas aquí), Apple espera recuperar el terreno perdido y demostrar que también puede ser un referente en el ámbito de la IA, aunque sin renunciar a su filosofía de privacidad y seguridad. ¿Lo conseguirá o será demasiado tarde? Solo el tiempo lo dirá. Mientras tanto, los usuarios de Apple pueden disfrutar de las ventajas de tener un asistente virtual como Siri, que les ayuda a hacer cosas como buscar información, enviar mensajes o poner música. Eso sí, siempre que no le pidan que haga chistes o que les cuente su vida, porque entonces se pondrá nerviosa y se callará.

Ciertamente, hay varios actores que están liderando la revolución de la IA desde diferentes perspectivas y con diferentes objetivos. Sin lugar a dudas, los retos son muchos para garantizar que la IA sea segura, justa y transparente para todos.

En lo personal, no me gusta Apple, y creo que no soy el único. Siempre he querido ir contra la corriente Apple. ¿Por qué? Porque me parece una marca sobrevalorada, elitista y aburrida. Sus productos son caros, cerrados y poco innovadores. Me aburren sus diseños minimalistas, sus colores neutros y sus anuncios pretenciosos. Prefiero otras opciones. Me gustan los productos que me permiten personalizarlos, explorarlos y modificarlos.

Lo que busco es algo que no sea Apple. Sin embargo, Apple tiene muchos fans. Fans que están dispuestos a pagar cualquier precio por tener el último modelo de iPhone o de Mac. No es un accidente que Apple sea una gran potencia. Estamos hablando de un gigante entre gigantes.

Pero lo cierto es que Apple se está quedando atrás en IA. Mientras que otras empresas como Google, OpenAI o Microsoft están invirtiendo y colaborando en proyectos de IA, Apple se ha mantenido al margen, confiando en su secretismo y su control. Pero eso le ha pasado factura, ya que no ha podido desarrollar aplicaciones de IA tan avanzadas y personalizadas como sus competidores.

Por eso, Apple se está apurando para construir sus propias herramientas de IA y ponerse al día. Pero ¿será suficiente? ¿Podrá recuperar el terreno perdido? ¿O será demasiado tarde? Solo el tiempo lo dirá. Mientras tanto, yo seguiré buscando algo que no sea Apple.

Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.

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Author: Gustavo Godoy

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